Los primeros encuentros con los padres

Cuando los padres están preocupados por su hijo y esa preocupación se prolonga, es esperable que acudan a un psicólogo infantil. Dejar a su hijo en manos de otra persona no es algo fácil y menos cuando la salud está en juego. Con el fin de ayudarles a confiar y entender qué está pasando se recomienda tener unas entrevistas previas con ellos. En estos encuentros con los padres, entre otras cuestiones, se puede abordar la forma de trabajar que tiene el psicólogo infantil.

Los niños no se expresan de la misma manera que los adultos. Por lo general, usan menos el lenguaje verbal y más otras expresiones comunicativas. Las palabras acompañarán sus juegos, pero no son la vía privilegiada de comunicación. Los dibujos, las historias o los movimientos que hacen en las sesiones son elementos que facilitan el acercamiento con el terapeuta.

El psicólogo infantil en la terapia

El psicólogo infantil se encargará de transmitir al niño, mediante su actitud y sus palabras, el deseo de conocerle y la disponibilidad para iniciar una actividad lúdica. Se mostrará cercano, confiable y con capacidad para estar con él. Le transmitirá que puede jugar y expresarse libremente mediante los elementos que hay en la sala (papeles, juguetes, juegos reglados, cuentos, etc.). Independientemente de la modalidad elegida por el pequeño, el profesional, poco a poco, le traducirá lo que va entendiendo. Dicho de otra manera, el niño y la psicóloga se comunicarán a través del juego al igual que lo hacen los adultos cuando hablan.

La importancia del juego

El juego, es un medio que facilita la comunicación entre el niño y el terapeuta y le ayuda a expresar su mundo interno. El juego le permite al niño tomar distancia emocional, le protege de la angustia y favorece la expresión de los problemas que tiene con personas importantes y necesarias para él. Si el niño no siente esa distancia es muy probable el juego se vea interrumpido o inhibido. Gracias al juego, o interrupciones de éste, el terapeuta puede conocer, entender lo que le pasa al niño y cómo lo gestiona.

Es esperable que el niño dé al psicólogo papeles en el juego. El profesional asumirá diferentes roles y por eso es importante que tenga capacidad de dramatizar el personaje asignado. Por lo general son personajes con los que el niño presenta dificultades y necesita ayuda. Será a través de esos personajes y de la trama del juego desde donde el psicólogo podrá introducir cambios o hacer comentarios sobre lo que sucede. Gracias a estas intervenciones el niño puede entender lo que pasa y buscar alternativas. En el juego podrá practicar diferentes habilidades e ir aprendiendo a resolver y gestionar la situación de otra forma. Es así como se usa el juego en la clínica con niños, y aunque para algunos adultos sea una actividad insignificante para los más pequeños es vital.

El juego es la forma que tiene los niños de miniaturizar la realidad para comprenderla y elaborarla. Si no fuera así, la vida, sus retos y complicaciones les serian incomprensibles e inalcanzables. Durante el juego en las sesiones de psicoterapia, el niño desarrolla recursos y habilidades que le serán necesarias y útiles para desenvolverse en la vida real, por eso es tan importante el juego en la psicoterapia con niños.