«La herida no se cicatriza sobre una espina» Proverbio africano
Estoy muy agradecida a las personas que han querido compartir su experiencia en este espacio. Son comentarios y reflexiones que han surgido de forma espontanea a lo largo de su proceso psicoterapéutico y que ellos generosamente han querido compartir. Detrás de cada testimonio hay una persona que decidió curar su herida.
Al igual que pasa en las sesiones de grupo, el hecho de compartir sus experiencias es enriquecedor para ellos y para quienes las reciben, en este caso para quienes las lean. Si les pedí permiso para publicarlas es porque pienso que son un magnífico ejemplo para mostrar que se puede vivir de otra manera. Son personas que han pasado por situaciones complicadas en sus vidas, apostaron por el cambio y ahora están viviendo mejor. Para ellos está siendo posible. Espero que para ti también lo sea.
Sé que en ocasiones el camino, la terapia, parece difícil y costoso. Juntos nos hemos encontrado piedras pesadas, piedras que hacían pensar que eran imposibles de mover e impedían ver por dónde podía seguir su camino. Afortunadamente unimos fuerzas ante los obstáculos y estas personas están pudiendo seguir caminando. Cada una con su ritmo, cada una hacia un lugar diferente…